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Brief notes:

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This composition won the first prize in the II Galician Composition Contest for Wind Orchestra 2009, symphonic section, and also was the test piece in the IV Galician Bands Contest 2010, first section. First performance was given by Galician Federation of Wind Orchestras (FGBMP), conducted by Xosé Carlos Seráns, at Rosalía Theatre of A Coruña (Spain) on December 30, 2009. It is dedicated to Andrés Valero Castells.

 

This symphony is my first work catalogued (opus 1), wrote when I was just 15-16 years old. Therefore, is one of my most appreciated and "immature" works, but also one which have been most played around the world. The symphony is cast in a "symphonic poem" form, divided in four movements that describe my own feelings and memories of the natural catastrophe caused by Prestige oil spill.

 

The Prestige oil spill was a environmental disaster in Galicia caused by the sinking of the oil tanker MV Prestige in 2002. The spill polluted thousands of kilometers of coastline and more than one thousand beaches on the Spanish, French and Portuguese coast, as well as causing great harm to the local fishing industry. The spill is the largest environmental catastrophe in the history of both Spain and Portugal. In the subsequent months, thousands of volunteers joined the public company TRAGSA (the firm chosen by the regional government to deal with the cleanup) to help clean the affected coastline. The massive cleaning campaign was a success, recovering most portions of coastline from not only the effects of the oil spill but also the accumulated usual contamination. A year after the spill, Galicia had more Blue Flags for its beaches (an award for those beaches with the highest standards in the European Union) than in the previous years.

This symphony has received a huge influence of another works and authors as Symphony No.1 “La Vall de la Murta” & “Symphony No.3 “Epidemia Silenciosa” by Andrés Valero Castells, to who is dedicated this work; a quote taken from Alfred Reed and Gustav Holst altogether with some cinematic sonorities influenced by Patrick Doyle and Kota Suzuki, whose music I had loved when I was 15. To complete the musical resources that conform this work, each movement evokes different Galician folk tunes which help to connect with a more ethnographic description of the localizations presented in the composition. These tunes are: “Alborada Galega”, “Himno Galego” by Pascual Veiga and “Negra Sombra” by Juan Montes.

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Esta composición obtuvo el primer premio en el II Concurso Gallego de Composición para Banda 2009, sección sinfónica, siendo también seleccionada como obra de obligada interpretación en el IV Certamen Gallego de Bandas 2010, primera sección. El estreno fue ofrecido por la Banda Sinfónica de la Federación Gallega de Bandas de Música Populares (FGBMP), dirigidos por Xosé Carlos Seráns en el Teatro Rosalía de A Coruña (España) el 30 de diciembre del 2009. Obra dedicada a Andrés Valero Castells.

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Esta sinfonía es mi primera composición catalogada (opus 1), escrita cuando tenía tan solo 15-16 años. Por esta razón, es una de mis composiciones más apreciada e inmadura a partes iguales, pero también la que sin duda más se ha interpretado alrededor del mundo. La sinfonía se estructura como un “poema sinfónico”, dividida en cuatro movimientos en los cuales describo mis sentimientos y recuerdos de la catástrofe natural producida por la marea negra del Prestige.

 

La marea negra del Prestige fue causada por el hundimiento en Galicia del petrolero MV Prestige en 2002. Esta marea negra contaminó miles de quilómetros de costa y más de mil playas a lo largo de España, Portugal y Francia, causando grandes daños a la industria pesquera gallega y llegando a ser catalogada como el desastre medioambiental más grande de la historia de España y Portugal. En los meses siguientes, miles de voluntarios se unieron a la compañía pública TRAGSA (firma escogida por el gobierno de Galicia para las tareas de limpieza), con la intención de ayudar a limpiar la línea de costa afectada. La masiva campaña de limpieza – cariñosamente bautizada como “marea blanca” – fue todo un éxito, consiguiendo recuperar y sanar no solo los miles de kilómetros de costa afectada, si no también zonas bajo los efectos de la contaminación habitual. Un año después de la marea negra, Galicia obtuvo el mayor número de banderas azules (premio concedido a aquellas playas con mayores estándares de calidad dentro de la Unión Europea), que en años anteriores al desastre.

 

Esta sinfonía recibió una gran influencia de otros autores y trabajos tales como la Sinfonía No.1 “La Vall de la Murta” y la Sinfonía No.3 “Epidemia Silenciosa” de Andrés Valero Castells, a quién está dedicada; dos citas extraídas de Alfred Reed y Gustav Holst así como ciertas influencias cinematográficas de autores como Patrick Doyle y Kota Suzuki; que son los autores y la música que amaba cuando tenía 15 años. Para completar las fuentes musicales que conforman este trabajo, cada movimiento explora o evoca diferentes composiciones populares gallegas con la intención de dotar a la obra de una descripción más etnográfica. Esas composiciones son la “Alborada galega” e “Himno galego” de Pascual Veiga, así como la “Negra sombra” de Juan Montes, empleada aquí como metáfora.

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